"La sommelierie está de luto..." Ese sería el inicio de una
nota formal obituaria que pretende amalgamar una infinidad de sentimientos
encontrados que generan la perdida de una pieza del gran rompecabezas de la
sommelierie venezolana, Julio Gómez.
Pero Julio, Julin, Sommelier florista, como lo conocíamos quienes hacemos vida en el mundo del vino estaba muy lejos de las falsas posturas y de la formalidad, Julio no era otra cosa más que a su encuentro un abrazo inmensamente fuerte de cariño que llegaba hasta los huesos, una sonrisa fácil, un Sommelier que disfrutaba el vino sin saltarse ninguno de sus sentidos, además de un amante de la belleza y como él se autodenominaba un compositor floral.
Es por ello Julio, que siempre vivirás en el abrazo, en cada flor y en cada copa de vino.
Es triste para todos nosotros tu partida, pero lo que si es cierto es que Dios gana en el cielo, las más bonitas flores y la mejor copa de vino de las manos de Julio Gómez Sommelier
Salud por ti amigo!
Pero Julio, Julin, Sommelier florista, como lo conocíamos quienes hacemos vida en el mundo del vino estaba muy lejos de las falsas posturas y de la formalidad, Julio no era otra cosa más que a su encuentro un abrazo inmensamente fuerte de cariño que llegaba hasta los huesos, una sonrisa fácil, un Sommelier que disfrutaba el vino sin saltarse ninguno de sus sentidos, además de un amante de la belleza y como él se autodenominaba un compositor floral.
Es por ello Julio, que siempre vivirás en el abrazo, en cada flor y en cada copa de vino.
Es triste para todos nosotros tu partida, pero lo que si es cierto es que Dios gana en el cielo, las más bonitas flores y la mejor copa de vino de las manos de Julio Gómez Sommelier
Salud por ti amigo!
BarrayCava