La presencia de los Jokilis en las calles, hoteles y restaurantes
durante carnavales se ha convertido en una de las tradiciones más llamativas de
la Colonia Tovar.
El Jokili es un arlequín que representa el espíritu coloniero que
contagia con mucha alegría a los
residentes y turistas.
Este año la asociación civil
cumple 40 años desde su fundación en esta población del estado Aragua.
Esta tradición, al igual que casi todo en la Colonia, es el
resultado de la unión de dos culturas. Es una expresión cultural que refleja el
mestizaje poblacional que nos caracteriza en Venezuela. El Jokili es el
personaje que representa el espíritu del carnaval coloniero, que en este 2016
conmemora los 40 años de su fundación.
Este hombre que juega al carnaval vino desde Alemania en la memoria y el espíritu de los colonos y
sembró su semilla en las nuevas generaciones de una forma casi imperceptible a
través de cuentos o pequeños versos. Pero fue Pablo Durr y su grupo de amigos
quienes soñaron y convirtieron en realidad, en 1976, la posibilidad de existencia
de una agrupación de carnaval en la
Colonia Tovar como las que existen al Sur de Alemania. Específicamente es una asociación de arlequines
como la de Edingen, ciudad de origen de muchos de los colonos, una población
con la que mantienen un gran vinculo.
Los siete arlequines pioneros salieron por primera vez en el
carnaval de 1977 y fue así como sentaron la primera piedra para formar lo que
hoy conocemos como la Asociación de Arlequines de la Colonia Tovar. Quizás
ellos nunca pensaron el alcance que tendría su idea, pero si algo tenían claro
eran los objetivos que querían alcanzar.
Su intención era crear una tradición folklórica para la Colonia
Tovar que se convirtiera en un poderoso atractivo a nivel nacional e
internacional, querían un medio amistoso por el cual reunirse socialmente y una
agrupación con visión realizadora y que proyectara en la iniciativa de la
comunidad tovarense.
Luego de cuatro décadas, estos objetivos se han cumplido y la meta
es darles continuidad. El Jokili es en la actualidad la figura del carnaval más
reconocida de la Colonia Tovar y le ha ganado el honor de convertirse en
Patrimonio Cultural. Cada año los turistas visitan estas montañas para
disfrutar de los originales rituales, observar las peculiares carrozas y
compartir con los personajes de la comparsa durante un colorido desfile donde
se exhibe el tricolor nacional mientras se baila al son de la música alemana. Este Jokili Coloniero es en esencia muy
parecido a su hermano de Endingen, pero las circunstancias lo han convertido en
una expresión cultural de origen alemán que fue modificandose para tomar su
propia personalidad. EL Jokili Coloniero tiene lo mejor de dos mundos. Es una
mezcla de la disciplina de los alemanes y la chispa de los venezolanos.
El Jokili es también una tradición familiar donde cada miembro de
la familia puede participar, por ello el amor y el respeto hacia esta figura
pasa como legado de generación en generación. Pero va aún más allá, es una
organización seria que participa y organiza eventos que promueven la cultura y
los valores colonieros porque sus miembros están conscientes de que estos
componentes son la esencia de su pueblo, de su Colonia Tovar.